De
María Jaramillo Alanís
Razones
y Palabras…
Va por Alejandro
Jaramillo Martínez (+)
Carrizos, Tamaulipas.-Desde
antes que llegase mi comadre "Ingrid" fue evidente que puso en jaque
a los ciudadanos, pues huérfanos de toda autoridad,-pues ya se van los
alcaldes- fue evidente que hizo falta atención, dedicación y noches de desvelo
para atender, prevenir que las personas que viven en comunidades a la rivera de
arroyos y ríos quedasen atrapadas, incomunicadas, hoy, el Río Purificación,
Corona, y todos los pequeños afluentes dieron muestra de que es necesario
tomarse muy en serio eso que algunos irresponsables juran de dientes para
afuera; "Hacer valer nuestra Constitución y proteger a las personas".
Es
increíble que un alcalde le diga a un periodista “cuentachiles” de la radio que
le informe por favor vía la radio donde el labora este "sesudo", cómo
va el estado del tiempo y Villa de Casas
hoy está aislado pues el Arroyo el Sarnoso se desbordó.
Está
noche miles están sin comida e incomunicados en 27 municipios de los 43 que
tiene Tamaulipas y esa es responsabilidad directa de alcaldes, gobernador,
gobierno federal, diputados, todos ellos han hecho muy poco por ésos miles.
Cavilaba
mientras veíamos asombrados los ríos anegando las parcelas y mi papá nos decía a mis hermanos y a mí y a
mi cuñado; "aquí está el Purón y allá a Pilón, cuidado que más abajo
desembocan en San Enrique, este llega directo al mar".
Es
decir, Nicolás de 89 años sabe, y sin tener una responsabilidad pública más la que
le da su sabiduría ancestral, que con la
naturaleza no se juega.
Pero
además si nadie atiene los avisos del Sistema Meteorológico Nacional o de la Dirección de Protección Civil, muy
poco podrán hacer por sus conciudadanos, es decir, incumplen con su deber.
Aún
más, me preguntaba; ¿y las lanchas que se tenían hace tres años cuando pegó el
Alex, y el helicóptero de protección Civil, y las cuadrillas y el personal? ¿Y
el Presupuesto para proteger la vida de las personas, para dotarlas de techos
provisionales, cobertores, una comida caliente, médicos y medicamentos? ¡Ah! No
es campaña. ¿Triste, verdad? Irresponsables, criminales, es poco.
Hoy
los ojos del mundo están en Acapulco, y en todo el estado de Guerrero, y existen
no sólo razones políticas para atender la emergencia allá, sino razones de
pesos contantes y sonantes.
En
ambos sentidos Tamaulipas no le representa una preocupación al Gobierno
federal, pues aquí, el priísmo hizo perder a Enrique Peña Nieto.
Aun
así es una canallada que el gobierno federal deje solos y a la suerte de las
avenidas de agua, de un pésimo gobernador y una partida de delincuentes a los
ciudadanos de Tamaulipas.
Si
hay que castigar pues que se castigue al gobierno del estado y a más de diez
alcaldes que precisamente se van al final de mes, muchos de ellos merecen la
cárcel pues ante la ola de violencia, montaron su residencia en Ciudad Victoria,
que atender a sus gobernados
Y
no pueden ser omisos al inejercicio presupuestal del gobierno estatal pues el agua todo lo descubre y salta a la vista que no han invertido en
materia social, infraestructura, en drenes, alcantarillado, contención y
construcción de diques, mantenimiento de canales de riego, es decir, también
merecen castigo.
Desatender
a los habitantes aislados e incomunicados de 27 municipios, es una cobardía y
una canallada.
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